En el ámbito de otras organizaciones internacionales que actúan a nivel europeo e incluso mundial, y de las que España forma parte, se ha incrementado en los últimos años el trabajo conjunto, el intercambio de información y de criterios, así como la adopción de prácticas administrativas comunes que se han extendido también a las Administraciones territoriales, de modo que en la actualidad la actividad de estas organizaciones no es posible sin la participación final de las regiones y entidades locales de los diferentes Estados.