La subdelegada del Gobierno, María Rivas, despidió hoy en el Aeródromo Militar de Santiago, junto con el Jefe del Aeródromo Militar de Santiago, Juan Pedro Velázquez-Gaztelu, y la ministra conselleira en la Embajada de Rumanía en España, Alina Popescu, al contingente de bomberos de Rumanía que durante la última semana prestó servicio en Galicia, para apoyar las tareas de extinción de los incendios forestales que arrasaron la comunidad este verano.
Rivas trasladó en nombre del Gobierno de España “el más profundo agradecimiento por el trabajo realizado”, subrayando que “con profesionalidad, disciplina y humanidad, protegieron a la población gallega en condiciones extremas, poniendo en riesgo sus vidas y demostrando un gran espíritu de sacrificio”.
La representante del Ejecutivo central destacó que la presencia de este equipo de 51 efectivos fue posible “gracias al trabajo conjunto de las instituciones y al esfuerzo del Gobierno de España, que no solo movilizó inmediatamente los recursos nacionales —la Unidad Militar de Emergencias, brigadas de refuerzo, medios aéreos y terrestres—, sino que también activó, a través de Protección Civil del Ministerio del Interior, los mecanismos europeos a petición de la Comunidad Autónoma”.
“Esta coordinación permitió desplegar un dispositivo sin precedentes, que unió la capacidad nacional con la fuerza de la cooperación internacional”, señaló.
Finalmente, Rivas puso en valor el carácter solidario y diplomático de esta misión, recordando que “los bomberos de Rumanía representan lo mejor de la cooperación entre nuestros pueblos y del espíritu europeo”. Su presencia aquí “no fue solo una ayuda técnica, fue también una misión diplomática de fraternidad entre Rumanía y España”, valoró.