El ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, ha visitado hoy las obras de restauración del Templo Masónico de la Logia de Añaza, en Santa Cruz de Tenerife, trabajos que financia el Gobierno de España. Torres ha destacado la relevancia histórica del inmueble, “por su significado en la defensa de los valores democráticos”. El inmueble fue incautado y saqueado por los sublevados en los primeros días del Golpe de Estado de 1936.
Entre sus paredes, además de las ceremonias de la Logia, se impartieron clases gratuitas y laicas para adultos, de acuerdo a las tesis pedagógicas más avanzadas de la época, sobre todo, de la II República. Además, albergó la impresión de un periódico que difundía los valores democráticos y de progreso.
Sin embargo, una vez se produjo la sublevación, todos los bienes y archivos de la Logia fueron incautados y el templo pasó a ser un lugar para promover la persecución a la masonería. “En un ejemplo más de las fake news de la dictadura, en el templo se hacían visitas guiadas en las que se decía que los masones hacían sacrificios de niños y brujería. Nada más lejos de la realidad”, ha aclarado Ángel Víctor Torres.
El ministro Torres, acompañado por el secretario de Estado de Memoria Democrática, Fernando Martínez, ha querido recalcar que el Gobierno de España seguirá mostrando un “compromiso absoluto con las víctimas” y que continuará con la tarea de “restituir la memoria de quienes dieron su vida por la defensa del orden constitucional y por los valores que definen a este país como democracia”.